Enclavado en una de las zonas más privilegiadas de la Costa Blanca, este exclusivo residencial se sitúa a escasos pasos del puerto de Guardamar del Segura, muy cerca de su emblemático pinar natural y de las extensas playas de arena fina que caracterizan esta localidad. La urbanización se rodea de una vibrante área comercial con todos los servicios necesarios a pocos metros, garantizando una experiencia de vida cómoda, funcional y conectada. La construcción del complejo se ha ejecutado con cimentación de hormigón armado, garantizando solidez y durabilidad. La urbanización cuenta con plazas de aparcamiento exteriores y zonas comunes cuidadosamente pavimentadas con gres antideslizante, ideales para disfrutar del clima mediterráneo con total seguridad. La fachada, con cerramientos de ladrillo hueco y aislamiento térmico interior, ofrece eficiencia energética y confort térmico durante todo el año. Cada vivienda ha sido diseñada pensando en el bienestar diario. Destacan los acabados de alta calidad como los suelos de gres porcelánico de primera en toda la casa, alicatados elegantes en los baños y techos lisos con acabados en escayola. La carpintería exterior de PVC con doble acristalamiento tipo Climalit proporciona un excelente aislamiento acústico y térmico, mientras que la puerta de entrada blindada y los armarios empotrados lacados en blanco añaden un toque de elegancia y seguridad. Las cocinas vienen completamente amuebladas con mobiliario moderno, encimera de Silestone o similar y fregadero empotrado, listas para ser disfrutadas desde el primer día. En los baños se incorporan muebles suspendidos, duchas con mampara de cristal, espejos y una cuidada grifería mono mando de alta gama. Además, cada vivienda está equipada con termo eléctrico de aerotermia de 100 litros, una solución eficiente y sostenible. Este residencial ha sido concebido para quienes buscan un estilo de vida relajado, rodeado de naturaleza y cerca del mar. Las zonas comunes están pensadas para fomentar el descanso, la convivencia y el disfrute al aire libre. Todo ello en un entorno que combina la proximidad de servicios urbanos con la tranquilidad de un entorno natural único. Guardamar del Segura, en la Costa Blanca, se destaca por sus extensas playas de arena fina y su entorno natural. Sus playas, como la Playa Centro y la Playa de la Roqueta, son ideales para el relax y los deportes acuáticos, mientras que sus dunas y pinares conforman un paisaje protegido. El turismo en Guardamar se centra en sus playas y su entorno natural, ideal para senderismo y observación de aves en el Parque Natural de las Dunas de Guardamar. El estilo de vida en Guardamar es relajado y cercano al mar. Los residentes y visitantes disfrutan de una vida tranquila, con una amplia oferta gastronómica basada en productos del mar y platos típicos de la región. La comunidad valora la naturaleza y promueve la vida al aire libre. Guardamar del Segura ofrece un equilibrio entre turismo costero, naturaleza y una vida serena junto al mar, atrayendo a quienes buscan tranquilidad en un entorno natural.